La Lotería de Pensilvania dio a conocer la historia de una mujer que recién terminó sus tratamientos contra el cáncer y que, para festejar esta noticia más su próximo cumpleaños, compró un boleto de lotería que le dio $5 millones de dólares
i vencer al cáncer no fuera motivo suficiente para cualquier persona de confirmar su buena fortuna, una mujer en Pensilvania festejó su cumpleaños por partida doble con esta noticia favorable y, para celebrar, con la compra de un billete de lotería, se lleva $5 millones de dólares.
Donna Osborne, de 75 años, compró su boleto de raspadito Monopoly Own It All para festejar su cumpleaños y celebrar que había terminado sus tratamientos contra el cáncer. La fiesta no terminaría ahí, ya que descubriría que su suerte contra la enfermedad no la habría abandonado y, por el contrario, multiplicó sus bendiciones al llevarse un premio de $5 millones de dólares.
En una cuestión de toma de decisiones repentinas, la residente del condado de Lancaster compartió a los funcionarios de la Lotería de Pensilvania que estuvo cerca de no visitar la tienda Speedway en Oregon Pike, en Leola, donde compró el billete premiado.
“Estaba en el aeropuerto con mi hija. Íbamos de camino a visitar a la familia en Florida cuando el vuelo se retrasó. Bueno, se retrasó tantas veces que decidí volver a casa. Mi hija se quedó y voló a Florida”, comentó Osborne. “¡Si no hubiera salido del aeropuerto, nunca habría comprado ese billete!”.
Osborne compartió que una motivación para comprar este boleto de lotería fue con la intención de celebrar la finalización de los tratamientos de radiación para el cáncer de mama que padecía y también adelantarse su regalo para su próximo cumpleaños. Jamás imaginó que perder un vuelo le daría $5 millones de dólares. Revisó su premio en el estacionamiento del Speedway.
“No podía creer lo que veía”, recuerda Osborne. “Volví a la tienda y le pregunté: ‘¿Puedes comprobar esto? ¿Está bien o mal?’. Y el empleado me dijo: ‘¡Está bien!’”.
Al ir a reclamar el premio, acompañada de su hija, recordó que la llamó a su llegada a Florida para contarle la noticia.
“Ella no me creyó”, aseguró Osborne.
A pesar de la edad y la cantidad obtenida, la incansable señora niega retirarse. Osborne tiene algunas ideas sobre qué hacer con el dinero del premio.
“No sé qué hacer conmigo misma, tengo que seguir adelante”, dijo. “Creo que invertiré parte del premio, seguro, ¡pero luego iré a Alaska!“.
Por samuel gonzalez la opinión